El trabajo de Federico García Trujillo está fuertemente ligado a una investigación formal del medio y los materiales con los que trabaja. En él, se establece una tensión entre los discursos intra-artísticos de la pintura con la realidad social, contextual y biográfica en la que se desarrollan. En esta exposición se reúnen piezas que se enmarcan dentro de dos líneas de trabajo que ha ido desarrollando en los últimos años: la primera está especialmente centrada en la revisión de archivos históricos proponiendo la práctica pictórica como un lenguaje documental y la segunda explora la imagen en la era digital a través de la pintura.