A través de la pieza videográfica Alegoría de la lógica . Imposiciones absurdas en el espacio público , Enric Maurí relata como ciertas remodelaciones en el espacio público, paradójicamente no tienen en cuenta al propio usuario.
Impidiendo el tráfico natural y libre, propician una serie de acciones que transgreden lo que la institución ha diseñado . En este caso una intervención de la empresa Adif, que se encarga de gestionar Cercanías de Renfe, concretamente en la estación de Cardedeu. Adif diseñó hace unos 5 años un recorrido que los usuarios debían seguir para acceder al tren desde el acceso a la estación o bien para salir de las instalaciones bajando de los trenes.
Marcó el itinerario con unos perfiles de obra de unos treinta centímetros de altura pintados de amarillo y siguiendo la pendiente del suelo con el objetivo de facilitar los accesos, pero los usuarios rechazan estas guías día a día, tren a tren.
Esta obra demuestra que los usuarios, en el uso que hacen diario y cotidiano. son los que terminan definiendo las rutas, los itinerarios y los usos del espacio público.
En el vídeo, Enric Maurí añade una pantalla amarilla a la altura de la cara de los usuarios y está claro que no impide que sus pensamientos sigan fluyendo independientemente de la marca .